
violencia de género, acoso escolar, ataques racistas, violaciones. Y puedo seguir.
¿A dónde queremos llegar?
La peor parte de todo esto es que es tan rutinario que ya no nos impresiona. Estamos acostumbrados a este tipo de indecencias.
Miles de personas muriendo de hambre, sin un hogar. "Qué pena" Sí, me parece genial que te de pena. Pero el hecho de que sientas pena no va a cambiar nada. Un simple mensaje de ayuda, un pequeño por ciento de donación, lo más mínimo, ya estás ayudando más que sintiendo "pena". Imaginad que todos los que tenemos vida cómoda pusiésemos nuestro grano de arena. Y con vida cómoda no me refiero a tener un yate o una mansión; hablo de todos los que tenemos un plato de comida caliente cada día y calefacción. La cosa cambiaría, pero para qué, sintiendo "pena" ya hemos cumplido nuestra parte. Ya somos mejores personas, ¿no? Claro.
Y si con todo esto he conseguido hacer reflexionar, aunque sea, a una persona; me daré por satisfecho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario